Todo lo bueno se acaba. Así, cuando ya te has enganchado a un servicio que parece que se ha vuelto imprescindible en tu vida, de golpe y porrazo te endosan una subida de precios. Sí, estamos a las puertas de un incremento de tarifas en el servicio de Amazon Prime, que tantas alegrías nos ha dado.
En concreto, el servicio está barajando una subida de entre 20 y 40 euros anuales. En suma, parece que el gigante del comercio electrónico tiene la intención de duplicar e incluso triplicar el precio actual que, como muchos ya sabrán, es de 19,95 anuales.
A tenor de las informaciones, la decisión ya no tiene vuelta atrás dado que Prime es ahora mismo ‘ridículamente barato’ y ese precio tan bajo está causando perjuicios a la empresa.
Este servicio data de 2011, justo cuando la empresa aterrizó en España, y supuso una revolución. Incluso entonces el precio era más bajo que el actual, pues los clientes solo tenían que abonar 14,95 euros al año para disfrutar de sus beneficios. En marzo de 2015 se decidió subirlo a 19,95 euros. No obstante, ahora se planea un incremento bastante más alto y que incluso motivará a muchos clientes a abandonar el servicio.
Según fuentes internas de la compañía, la subida lleva meditándose un tiempo. De hecho, el año pasado ya se intentó ponerla en marcha, pero se frustró en el último momento. Entonces, hace tan solo un año, el negocio iba bien y los objetivos se estaban cumpliendo. ‘Pero ahora –señalan– ya es insostenible. Está creando tensiones internas: no puedes estar exigiendo unos objetivos de crecimiento en ingresos y clientes en Prime similares al resto de países y a la vez cobrar un precio tan bajo en España. Una cosa es ofrecer un precio competitivo y otra regalarlo’.
Si echamos un vistazo al resto de países, apreciaremos que en éstos se paga un precio mucho mayor por el mismo servicio. Sin ir más lejos, en Francia abonan 49,95 euros. Parece que ya es tiempo de igualarnos –para bien o para mal– a nuestros vecinos galos.